Para reconocer el rol de la mujer en la industria minera de Chile, el Ministerio de Minería junto al Ministerio de la Mujer y Equidad de género realizaron una ceremonia para destacar la labor de las compañías con las mejores políticas en esta materia. Una de las categorías premiadas fue «Mujer destacada en minería», que fue otorgado Ana Bran Hernández, Head of del Centro de Excelencia del Mantenimiento e Ingeniería (MECoE) de BHP. En esta entrevista de Minería Chilena explica los desafíos a los que se ha enfrentado en su rol dentro de la compañía.
¿Cómo se siente por haber ganado este premio y qué significa para usted?
Es un gran orgullo por varias razones. Primero porque mi equipo hizo la postulación, entonces que ellos me reconozcan me abre el corazón de emoción y significa que tienen confianza en mí y también, que creen que mi trayectoria podría ayudar a otras mujeres a postular en esas posiciones. Han pasado bastantes cosas con las personas que he hablado porque me dicen ‘Ana, nadie tiene tu experiencia’. Lo que ocurre es que las mujeres en minería tienen más cargos bajos, de funciones, pero mi equipo me dice que he estado en ingeniería, en operaciones en funciones, comercial y otros roles que son tradicionalmente masculinos. Entonces, esto para mí significa un reconocimiento de mi trayectoria laboral, pero también es un reconocimiento de todas las personas que me ayudaron a llegar a este punto: mentores, sponsors, gente que me apoyó y mis padres. Soy australiana porque viví casi 30 años allá pero mis padres son latinos, así que son bastante latinos también en la forma de pensar. Mi padre me decía que ‘esta carrera es de hombre o este deporte es para hombres’ y mi mamá siempre me decía ‘no escuches a tu papá, haz lo que quieras, vamos yo te ayudo’, entonces eran un buen balance. También es un reconocimiento es para mi esposo porque también me ayuda, se queda acá cuidando a mi hija y eso contribuye a poder desempeñarme en el trabajo, algo que en Chile tampoco es normal. Todo eso me hace pensar que tenemos que sacar los sesgos de la comunidad, que una mujer debería quedarse en la casa a cuidar a los hijos. Eso no es así porque cualquiera de los dos -madre o padre-puede tomar ese rol, no es definido a un género.
¿En qué aspectos cree haber influenciado para lograr cambios en la inclusión de la mujer en minería?
Bastante cosas han ocurrido. Algo que siempre digo y más cuando me doy cuenta que soy un referente, es que las mujeres no pueden ser lo que no pueden ver. Entonces, la habilidad de ser una persona influyente en la toma de decisiones para asegurar que personas puedan postular o que consideremos en el proceso de reclutamiento, es una forma diferente. Eso ha significado traer a más personas con habilidades que no son las tradicionales y eso es súper importante. A veces se nos olvida que somos una comunidad dentro de la minería que se refleja las comunidades en las que operamos y en eso tenemos que enfocarnos. Así que tenemos que cambiar varios procesos, cambiar la forma en que pensamos en el reclutamiento, dejar los sesgos que tenemos en términos de quienes seleccionamos. No deberíamos seleccionar solo por la universidad. Acá en Chile yo no tenía ese sesgo y decía ‘eso no me importa, lo realmente importante es qué experiencia tienen, cuáles han sido los resultados que han obtenido durante su carrera’, pero todos veían siempre la universidad primero. Lo he entendido, pero es algo que bastantes personas tienen incrustadas en las decisiones. Hay que pensar en cómo quito esos espacios para que ya no piensen de la misma forma y que no seleccionen personas que son su espejo. Con mi equipo nos hemos asegurado de seleccionar mejores personas basándonos en su habilidad y capacidad, no necesariamente por la experiencia.
¿Cómo imagina el mundo laboral de las mujeres de este sector en 20 años?
En 20 años ya no será tema porque no estaríamos hablando que no hay mujeres en posiciones de liderazgo, no estaríamos hablando de que no hay mujeres en juntas directivas, que también es otro espacio importante dentro del liderazgo. Me gustaría que en 20 años estemos hablando que la mayoría de las mineras tengan una presidenta y en todos los niveles de la organización exista un balance de género mejor que el de hoy.
¿Qué mensaje les daría a las mujeres que quieren entrar a la industria minera, considerando que es un mundo laboral históricamente ocupado por hombres?
«El mundo está cambiando». Les diría que comiencen a averiguar un poco más, no solo porque no conocen a nadie trabajando en la minería no significa que no deberían postular. Lo segundo es que necesitamos a todas las diferentes mujeres, no importa si se especifican en finanzas, retail, periodistas, enfermeras. Necesitamos todas esas habilidades dentro de la minería y el mensaje es que no tengan vergüenza porque tal vez no necesariamente cumplen con el 100% del perfil que están pidiendo en los avisos, pero no seamos tan duras como mujeres. Hay que quitarse esa mentalidad, entonces el mensaje es que postulen. Las estamos esperando.
¿Cuál es su rol dentro del Centro de Excelencia del Mantenimiento e Ingeniería?
Soy la Head of del Centro de Excelencia del Mantenimiento e Ingeniería (MECoE) de BHP, aseguro que mi equipo provea de servicios para desarrollar estrategias de mantenimiento, damos apoyo para planificar y programar de mediano a largo plazo, y ayudamos a tomar mejores decisiones. También tenemos un espacio donde apoyamos en la alineación de defectos, donde aportamos con gestión de activos y reportabilidad en términos de comparaciones que hacemos dentro de BHP y cómo nos comparamos en términos de operación, producción y efectividad de nuestras operaciones acá en Chile con nuestros centros de Australia.
¿En qué proyectos está trabajando en el Centro?
Acabamos de terminar el gran proyecto que teníamos que era la implementación del MCOB, acá en América. Eso significó traer todo el trabajo que se hacía en otro sitio acá a Santiago. Ese fue el proyecto más grande y lo terminamos en julio, fue un trabajo de tres años. Tenemos varios proyectos, estamos trabajando en cómo mejorar el desempeño que tienen las operaciones, revisar las estrategias para ser más efectivos y eficientes para así asegurar que el negocio tenga buenos resultados.
¿Qué cambios ha generado el Centro dentro de las operaciones de BHP?
El principal cambio es que hemos aumentado la seguridad y otro es que hemos estandarizado la forma en que hacemos las planificaciones. Todos los equipos están programando la forma en que hacemos mantenimiento, independiente si estás trabajando en camiones o concentradoras. Esa filosofía asociada al cumplimiento de procesos es algo en lo que hemos sido bastante disciplinados para asegurar la continuidad.
¿Qué proyecciones tienen para este año y el próximo?
El próximo año nos vamos a enfocar en mejorar las estrategias. Tenemos una oportunidad en términos de cómo nos aseguramos que todo el trabajo que estamos planificando llegue a sitio, asegurando que tenemos los recursos que necesitamos, los componentes y optimizar ese trabajo.
¿Qué es lo que más destaca de su rol dentro del Centro?
Para mí, es el equipo. El ambiente que hemos podido crear, me encanta ir al trabajo, hablar con las distintas personas. Nosotros somos diferentes porque la función no es tan jerárquica, puedo acercarme a un especialista y me dicen exactamente cómo son las cosas, no están preocupados de que haya que hablar con el líder, después con el gerente y que luego el gerente venga a decirme las noticias a mí, entonces el ambiente facilita el mejoramiento continuo y eso lo destaco de mi equipo. Estoy súper orgullosa de ellos.
