División Andina de Codelco inició recientemente las pruebas con carga de mineral en los equipos que forman parte de su proyecto Traspaso. La iniciativa, que consideró una inversión de US$1.326 millones, busca extender en 30 años la producción de este centro de trabajo, ubicado en el Valle de Aconcagua, a 3.500 metros sobre el nivel del mar en medio de la Cordillera de Los Andes.
El nuevo sistema Traspaso Mina-Planta implica que los más de 50 equipos que actualmente se utilizan en el proceso de chancado y transporte de mineral, serán remplazados por un solo sistema de 15 equipos. “De esta forma, disminuimos la exposición al riesgo de las personas y facilitamos la operación y mantención”, explicó Rodrigo Barrera, gerente general de Codelco Andina.
Desafío de ingeniería
El proyecto Traspaso Andina integra como parte de su infraestructura un domo de 52 metros de altura que, además de proteger al nuevo chancador primario de las bajas temperaturas invernales, mitiga en forma considerable la emisión de material particulado al ambiente.
En tanto, el uso de una correa transportadora de mineral de tipo regenerativa, con una extensión de 4 kilómetros de largo, permitirá inyectar a la red divisional más de 3,6 megawatts, lo que permitirá disminuir el consumo de fuentes externas.
Desde Codelco explican que fueron ocho años de construcción, “en una extensión de 44 hectáreas ubicadas en una compleja zona geográfica, de alta cordillera, donde las temperaturas en época de invierno pueden alcanzar fácilmente los 20 grados bajo cero.
La puesta en marcha de este proyecto considera una etapa de por lo menos cuatro meses de ramp up, que incrementará sistemáticamente el ritmo productivo. “Esto se realizará con un equipo propio, para operar 360 días continuos, manteniendo los niveles actuales de procesamiento de mineral con miras a una faena cien por ciento rajo”, señaló Rodrigo Barrera.