Declaración del IIMCh: “Renacionalización de la minería es una propuesta inadecuada para los intereses del país”

A la luz de las recientes decisiones adoptadas por la Comisión de Medio Ambiente de la Convención Constitucional, como la del 13 de enero, que -en líneas gruesas- plantea la nacionalización de las empresas mineras, y las de este sábado 5 de marzo, en que además se rechazó la Iniciativa de Norma Popular promovida por la red Compromiso Minero; el Instituto de Ingenieros de Minas de Chile (IIMCh) resolvió hacer pública una reflexión sobre estas acciones, y la posición final acordada.

La conclusión de los profesionales de la minería fue rotunda: “La iniciativa popular de renacionalización de la minería es una propuesta inadecuada para los intereses del país” (lea acá la declaración completa).

Para llegar a esta decisión, el IIMCh hizo un análisis a conciencia. De hecho, el texto oficial precisa que “dada la importancia del tema para el desarrollo del país, del Estado de Chile y de las regiones mineras, el Instituto de Ingenieros de Minas de Chile (IIMCh) ha decidido analizar el tema en profundidad, de manera informada y equilibrada con los intereses de los actores antes indicados, entendiendo que la minería debe contribuir con el desarrollo social, económico y cultural del país”. Asimismo, se recalca que esta organización –con 91 años de existencia- la conforman profesionales individuales afiliados  voluntariamente,  por lo que  no defiende “intereses de algún sector económico, social o sindical”.

En lo medular, el IIMCh parte reafirmando que “siempre ha celebrado la existencia de una triada virtuosa entre la minería estatal, que da recursos económicos para el Estado; la minería privada que, a través de recursos económicos externos, ha dado riquezas al país (y sus accionistas), y una pujante mediana minería, más insertada en la comunidad chilena, que da trabajo de calidad a una parte importante de la población en aquellas zonas mineras del país”.

Acto segiodo, el gremio reconoce que las condiciones económicas, sociales y políticas cambian en el tiempo,  y por ello, “es razonable analizar: ¿Cuál es la situación minera de hoy?”.

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Proceso de reflexión

En primer lugar, se advierte que Codelco actualmente no tiene fondos para hacer inversiones mayores que permitan aumentar su producción, ya sea con nuevos yacimientos y/o expandiendo los existentes.

Con respecto a la minería privada, se considera que “ha sido eficiente y rentable; lo que no quita que pueda hacer un mayor aporte al país, en particular cuando los ciclos de precios son altos”.

El análisis también aborda la visión de la ciudadanía, haciendo notar que si bien fue apoyo relevante para la nacionalización en los años 70, hoy ve a la minería como una actividad contaminante, extractivista, creadora de zonas de sacrificio y carente de innovación. Visión que para el IIMCh, “está lejos de la realidad”. 

De hecho, en la declaración se enfatiza que “La complejidad de la industria minera, hace que ésta sea una de las que más innovación tecnológica y conocimiento técnico aplicado desarrolla y, con ello, aporta al conocimiento que necesita el país”. En la misma línea, se hace hincapié que muchos de los desafíos no resueltos en el pasado, como los ambientales, “han sido controlados, reducidos o eliminados; siendo la minería una de las industrias con más altos estándares en Chile”.

Se argumenta, además, que todos los gobiernos han reconocido su aporte a las finanzas estatales, tanto por los excedentes de la minería estatal, como  por los impuestos directos de la minería privada. A lo que  suman la contribución del Fondo de Reserva de Pensiones (FRP) y del Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES),

El IIMCh también enfatiza la contribución indirecta de esta actividad, por  ejemplo, con la generación de empleos de calidad en la construcción y en la operación de las obras mineras, con efecto multiplicador fuera de la industria minera (proveedores/servicios), “lo que explica de manera especial el crecimiento de la economía durante 1990 a 2010”, se remarca.

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Finalmente, el IIMCh llama a recordar que la Nacionalización del Cobre en 1971 generó un bloqueo internacional para la compra de repuestos y suministros, que llevó´ al Estado chileno a pagar una importante indemnización a las empresas afectadas.

Resolución del gremio

En consideración a todo lo anterior, el IIMCh  resolvió los siguientes postulados:

– La minería chilena, tanto estatal como privada, ha sido el motor económico de Chile en los últimos 80 años;

– La minería puede y debe seguir creciendo, mejorando constantemente sus estándares ambientales y de relaciones con las comunidades;

– En este siglo, Codelco ha demostrado que a duras penas puede mantener su producción por restricciones de capital, exceso de deudas financieras y controles excesivos para una empresa minera dinámica, como son los que ejerce la Contraloría.

– Asimismo, la corporación difícilmente podría manejar eficientemente una industria cuatro veces superior a su producción actual; como consecuencia de esto, Chile no podría soportar un colapso de su principal fuente de divisas y mayor puntal de desarrollo de la economía;

– Chile no tiene fondos para indemnizar, según los acuerdos vigentes, la nacionalización de las grandes empresas privadas. Y una nacionalización sin pagos adecuados ,afectaría fuertemente la inversión extranjera en Chile.

– Si toda la minería fuera estatal, y su administración fuera similar a la de Codelco, la producción decaería inevitablemente, porque ningún Gobierno estaría dispuesto a destinar los más de US$400 millones anuales que se requieren en exploraciones, o los miles de millones de dólares que supone mantener las capacidades productivas actuales.

– La triada de minería estatal fuerte, minería privada pujante y mediana minería activa, debe mantenerse; pero eliminando las restricciones que afectan sus desarrollos, tal como lo ha planteado en IIMCh en este último tiempo.

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– Las regiones mineras no disponen de alternativas que permitan reemplazar en el corto, mediano y largo plazo, la fuente de recursos o factores de desarrollo originados por la actividad minera; tal como ya mostró antes la minería del salitre en el norte, y del petróleo y gas en Magallanes.

Conclusiones

En resumen, el gremio de profesionales mineros resuelve que la iniciativa aludida: “No tiene soporte lógico, ni es una solución efectiva para los problemas financieros de la Nación; más aún, generará un retroceso y el inicio de un deterioro económico, partiendo por aquellas comunas del norte del país”.

Sin desmedro de lo anterior, el IIMCh respalda que la minería privada tiene espacios para tributar más; y que el Gobierno tiene la opción de dictar leyes que restrinjan el acaparamiento de propiedades mineras. “Finalmente – se acota en la declaración-, nada le impide analizar y discutir leyes de estanco que empujen a todas las empresas mineras, tanto públicas como privadas, a generar más enclavamientos productivos, que permitan un mayor desarrollo de nuestra riqueza minera, sin los riesgos y conflictos asociados a un quiebre esencial de las regulaciones”.

El documento culmina con el siguiente mensaje: “Los profesionales mineros que apoyamos la Nacionalización de los años 70 y hemos participado en el desarrollo de la minería privada de las últimas décadas, ratificamos que una minería estatal fuerte y una minería privada pujante, pero más comprometida con el desarrollo nacional, son la mejor opción para el país; y que una política de renacionalización hoy día, no es consistente ni necesaria para el desarrollo de nuestra nación, en un mundo cada vez más conectado. En conclusión, consideramos que la iniciativa popular de renacionalización de la minería es una propuesta inadecuada para los intereses del país”.