La participación femenina actual es el doble que hace 10 años, pero sigue existiendo una importante brecha que las empresas están reduciendo mediante programas y capacitaciones.
Si bien el incremento de la participación femenina en la industria chilena ha sido notoria en la última década, estamos lejos de alcanzar los porcentajes de países como Canadá o Australia. Mientras que en Chile la cifra llega recién al 13%, en países mineros desarrollados ese número escala hasta el 30% en algunas empresas.
Según ministra de Minería, Marcela Hernando «aún las cifras están muy por debajo de lo que el mundo demanda y por eso tenemos que seguir impulsando la participación femenina en los diversos puestos de trabajo que tiene esta industria. Queremos alcanzar una participación femenina en la industria de un 20% a 2030, y de un 35% a 2050. Asimismo, queremos contar con políticas de diversidad e inclusión, conciliación laboral, familiar y personal en el 100% de las empresas medianas y grandes del sector para el año 2030.»
En la búsqueda de incrementar la presencia femenina en el ámbito minero, algunas empresas han destacado por sus esfuerzos y logros. El gigante australiano BHP logró superar el 34,5% de participación femenina en su plantilla y Spence, una de sus operaciones, ostenta el récord con la más alta representación en Chile, llegando al 38,4%.
Para lograr estos avances, las compañías han implementado diversos programas y políticas, incluyendo formación y capacitación específica para mujeres interesadas en trabajar en minería. Ejemplo de ello es el programa «Mineras» liderado por Escondida | BHP, que ha capacitado a más de 450 mujeres desde su lanzamiento en 2017. Estas iniciativas incluyen formación en áreas altamente demandadas por la industria y ofrecen oportunidades de crecimiento profesional en el rubro minero.
En su versión más reciente se logró la convocatoria más grande de su historia: 180 mujeres se especializarán durante tres meses como Operadoras Planta y Operadoras Mina, en el Centro de Entrenamiento Industrial y Minero, CEIM.
Por su parte, Antofagasta Minerals inició el año 2018 su Estrategia de Diversidad e Inclusión, donde definieron un camino con focos y metas para el corto, mediano y largo plazo que permita que todas las personas de la empresa alcancen su máximo potencial. Dentro de la estrategia está incorporar a mujeres en todos los niveles de la organización, para alcanzar mejores resultados de negocio y aprovechar los beneficios de un equipo diverso. En conclusión y dado esta estrategia planteada por Antofagasta Minerals el 2018, la participación de mujeres aumentó de 17,4 % en 2021 a 20,6 % en 2022.
Otra iniciativa para promover el desarrollo femenino es la implementada por Freeport McMoran con su Programa Aprendices. La compañía ha desarrollado el programa de aprendices y formación técnica para mujeres, con el objetivo de contribuir a su desarrollo personal y laboral, generando oportunidades de empleo en posiciones que han sido históricamente ocupadas por varones.
Los programas desarrollados durante 2022 fueron: aprendices de equipos móviles y pesados; operación de camiones de extracción minera; operación de camiones tolva y asistentes de geología y sondaje. De esta manera la compañía logró el 2022, capacitar a 120 personas, de las cuales 116 corresponden a mujeres de la Región de Antofagasta. El proceso finalizó con la contratación de catorce de ellas, quienes pasaron a formar parte de la compañía, mientras que nueve de las participantes del programa se encuentran en proceso de aprendiz en el área de Geología y Sondaje.
A pesar de estos esfuerzos, persisten desafíos para cerrar la brecha de género en el sector minero. Las ocupaciones altamente masculinizadas, como la minería y la construcción, continúan siendo un problema, y los estereotipos de género dificultan la participación de mujeres en roles técnicos y de toma de decisiones. Además, aspectos como la conciliación laboral y familiar, la adaptabilidad de las políticas de reclutamiento y las brechas salariales, también deben abordarse para lograr una verdadera inclusión y diversidad en la industria.