La iniciativa liderada e impulsada por la Compañía Minera del Pacífico y ejecutada junto a Acústica Marina cuenta desde febrero de este año con sus dos primeras boyas hidroacústicas operativas transmitiendo datos en tiempo real. Están instaladas en la localidad de Chungungo y tienen como principal objetivo monitorear y mapear el ruido submarino para salvaguardar a las ballenas y la fauna marina.
Desde su puesta en marcha que se monitorea principalmente a la fauna marina y tipos de embarcaciones. Los equipos se encuentran realizando registros, lo que se visibiliza en las plataformas de control. Esta es la única iniciativa en Chile que contará con una sala de inmersión acústica de uso educativo para la comunidad local, quienes visiten la zona y para conocimiento científico-tecnológico. “Desde CMP y el proyecto de Puerto Cruz Grande, estamos contentos en seguir liderando y desarrollando esta única e innovadora iniciativa en donde la protección a la fauna marina es la prioridad principal. Ya está en desarrollo la creación del observatorio hidroacústico, una plataforma interna que nos permitirá monitorear en tiempo real la data recopilada desde las boyas”, contó Claudia Monreal, Gerente de Planificación y Desarrollo de la Compañía Minera del Pacífico.
En la segunda etapa del proyecto, planificada para junio, se implementarán las funciones inteligentes como el trabajo de reconocimiento y la generación de alertas. En cuanto a las estaciones 3 y 4, se espera que estén en funcionamiento antes de mitad de año, lo que significará que Chile cuente con la primera y más importante red de boyas hidroacústicas a nivel mundial operativas en el agua.
El posicionamiento de las boyas responde principalmente a factores o condiciones acústicas, ya que se busca que logren un buen nivel de toma de datos y que los sonidos obtenidos proporcionen información relevante sobre los tránsitos tanto de las embarcaciones como de los tránsitos biológicos. Como uno de los objetivos principales del proyecto, también las boyas se van incorporarán en la ruta de navegación de las embarcaciones que transiten por la zona.
Este es un proyecto liderado por mujeres, de carácter interdisciplinar y sustentable: es un sistema de monitoreo acústico pasivo, por lo que no genera ningún tipo de contaminación acústica y utiliza ERNC en cada boya, al funcionar 100% por medio de energía con paneles solares.