Elizabeth Castillo, de 26 años, es la primera maquinista mujer habilitada para operar todo tipo de trenes de Ferrocarril de Antofagasta (FCAB) a lo largo de la línea férrea, terminales y patios. El pasado 19 de abril llevó el mando del tren 1209, desde Estación Desesperado, entre Mejillones y Prat, hasta Estación Los Arrieros, cerca de Sierra Gorda.
Nueve horas duró el viaje -de 140 kms- en que condujo dos locomotoras GT42, las más modernas de la flota de esta empresa, y 19 portacontenedores con isotanques de ácido sulfúrico. Una vez en destino, señalan desde la compañía del grupo Antofagasta Plc, «ejecutó con dominio las maniobras de entrega de la carga, hasta que fue relevada por la siguiente tripulación».
“Soñé ser la primera maquinista de trenes de línea del Ferrocarril de Antofagasta, y trabajé duro para lograrlo», señaló la nueva operadora de trenes. Dijo, además, que también es un logro para FCAB, «que ha decidido transformarse, modernizarse y dar prioridad a la diversidad de género. Me siento muy orgullosa de mí misma, de haber aprovechado la oportunidad de formarme; confié en mis capacidades, pero también tuve en este proceso muy buenos compañeros, y tutores expertos, a quienes les estoy agradecida”.
Ricky Orrego fue el ‘Maquinista Tutor’ que estuvo a cargo del proceso de formación práctica de Elizabeth Castillo. Al respecto, comentó: «Fue una experiencia excepcional, en la que Elizabeth aprendió no solo a conducir estas máquinas, sino a entender profundamente la operación ferroviaria; a pensar y actuar en equipo; a revisar cada etapa de armado del convoy, funcionamiento del sistema valvular de la locomotora, el protocolo para solicitar vía libre, el perfil de la línea para comandar un tren en óptimas condiciones hasta la entrega de la carga, siguiendo todos los protocolos establecidos». Asimismo, enfatizó que en FCAB «queremos que sigan subiendo más mujeres a operar”.
La gerenta general de FCAB, Katharina Jenny, remarcó que con este hito, la compañía y su equipo femenino reafirman el compromiso de avanzar en igualdad de condición que los hombres. “Nuestro cambio organizacional no sólo es técnico, sino cultural. Elizabeth inspira a nuevas generaciones a recorrer caminos poco explorados. Es nuestra primera operadora de trenes de línea, pero no es un caso raro; ella fortalece la inclusión de la diversidad, nuestro orgullo ferroviario y la aspiración de ser una empresa moderna, competitiva y con la capacidad de entrar en nuevos mercados, sin perder la esencia y lo que representamos para la región”, sostuvo.