El Decálogo Minero por la Incorporación de Mujeres y la Conciliación de la Vida Laboral, Familiar y Personal y Buenas Prácticas de Género para el Sector Minero, son dos de los documentos que se han elaborado gracias al trabajo de la Mesa Nacional de Mujer y Minería. Estas guías inéditas en el rubro son dos ejemplos de los avances en materia de equidad y género de esta instancia público-privada creada en 2018, por los ministerio de Minería y de la Mujer.
Según Maritza Henríquez, de Representación Minera de la Red Ingenieras de Minas (RIM), la Mesa se ha convertido en una instancia de compromisos de entes público-privados “en pos de las buenas prácticas laborales y una plataforma para levantar proyectos de alto impacto para las mujeres y la comunidad en los territorios vinculados con la industria minera”.
El dato no es mejor, ya que la equidad de género y las buenas prácticas laborales son ejes transversales de la Política Nacional Minera 2050, por lo que se requiere de un compromiso público y privado. “No solo hablamos de inserción de la mujer, sino también su retención en la industria y el encantar a otras , ya que es la red de contactos lo que requieren las mujeres para tener nuevas oportunidades laborales”, explicó Henríquez.
Para Daniela Musalem, vicepresidenta de Recursos Humanos de FLSmidth Sudamérica, la Mesa ha sido un espacio valioso porque avanzó en la estandarización de buenas prácticas y mediciones. “Es importante que la mesa continúe para crear alianzas que busquen incorporar nuevas mujeres a la industria y compartir esfuerzos para generar una cultura común que convierta al rubro en uno atractivo para las nuevas generaciones”, opinó.
Con equidad todos ganan
En 2018 se lanzó la iniciativa para disminuir la brecha de participación entre mujeres y hombres en el sector minero. Asimismo, se convocó a empresas, gremios e instituciones para abordar los desafíos de manera transversal. Sin embargo, para Consuelo Fertilio, directora ejecutiva de Mujeres Ingenieras de Chile, el desafío no está solo en seguir acortando las brechas: “Debemos derribar el mito que cuando hablamos de equidad de género solo es en beneficio para las mujeres. Trabajar en aumentar la participación y enfocarnos en la conciliación, con foco en la corresponsabilidad, van de la mano y son un aporte para tener una mejor sociedad en su conjunto”.
“En 2021 suscribimos el compromiso por el aumento de la participación femenina en la industria minera, que contempla participar anualmente de la medición, guiándose por los indicadores propuestos en la Mesa, con el objeto de llevar un registro de los avances”, contó Edgar Blanco, subsecretario de Minería. Otras medidas tomadas por la instancia son organizar paneles representativos con al menos un 30% de participación de hombres o mujeres, evitando dejar a las mujeres en un rol de moderadora, e identificar posiciones masculinizadas para incorporar a más mujeres en ellas.
‘”No podemos pensar en el futuro de la minería sin enfoque de género. En una industria de características tan masculinizadas es positivo abrir un espacio de diálogo para la equidad de género, ya que permite problematizar y atacar las brechas que impiden una participación igualitaria”, opinó el subsecretario. “Es la oportunidad de generar un trabajo colaborativo entre todos los actores que influyen en avanzar hacia una industria inclusiva con foco de género”, enfatizó Marco Berdichevsky, vicepresidente de Recursos Humanos para Finning Sudamérica. A su parecer, el aporte fundamental de la Mesa es que ha podido elaborar acuerdos, acciones y prácticas para abrir espacios, “para transitar en el cambio cultural y generar las condiciones para un ecosistema minero diverso que suma a su fuerza laboral el gran talento femenino disponible en el país”, agregó.