El innovador proceso utiliza microorganismos muertos y malezas del Altiplano para reciclar metales estratégicos, reduciendo la contaminación ambiental.
Chile, generador de más de 80 millones de toneladas de baterías de litio en desuso al año, recicla apenas el 5% de estos residuos, según datos recientes. En respuesta a este desafío, Liey-si Wong Pinto, investigadora de Lithium I+D+i de la Universidad Católica del Norte (UCN), lidera un innovador proyecto para obtener cobalto y nanopartículas metálicas mediante un proceso biodegradable que utiliza microorganismos muertos y malezas del Altiplano. Este método, conocido como «bio nano minería de desechos industriales», busca minimizar la huella de carbono e hídrica de los procesos de reciclaje.
Las baterías desechadas contienen cobre y cobalto, elementos considerados estratégicos a nivel mundial. “Si tú dejas de abastecer al mundo con cobalto, el mundo se detiene, y por eso está dentro de las denominadas materias primas estratégicas. Los minerales obtenidos de los desechos mineros o industriales se denominan minería secundaria, y la industria del litio ofrece una nueva línea de investigación y producción”, explicó Wong Pinto.
El proceso desarrollado por la investigadora utiliza microorganismos extremófilos y malezas locales para extraer nanopartículas de los desechos. Estas nanopartículas, conocidas como «súper materiales», han demostrado propiedades excepcionales como conductores y catalizadores. Los microorganismos, conservados a temperaturas de hasta -80°C, son capaces de descomponer los metales presentes en las baterías, generando una solución rica en minerales reutilizables.
En Chile, solo tres empresas, todas localizadas en la región Metropolitana, reciclan baterías de litio. El resto termina en rellenos sanitarios comunes, donde liberan contaminantes al medio ambiente. Según Wong Pinto, la bio minería no solo ofrece una solución ambiental, sino también una alternativa económica y eficaz frente a métodos convencionales como la lixiviación, que suele ser altamente contaminante.
“Las baterías, aunque se denominan de litio, contienen muy poco de este mineral, pero sí poseen cobre y cobalto en cantidades significativas. Este método permite extraer esos metales de manera sustentable y con un impacto ambiental reducido”, afirmó la investigadora.
El proyecto se enmarca en Lithium I+D+i, iniciativa conjunta entre la UCN y la empresa minera SQM, que desde 2022 impulsa investigaciones a lo largo de toda la cadena de valor del litio. El programa busca avanzar en la producción de materiales para baterías, sistemas electrónicos y reciclaje sustentable, además de formar capital humano avanzado y desarrollar infraestructura científica de vanguardia.
Para Wong Pinto, la investigación ofrece una solución doble: reducir los desechos industriales y contribuir al desarrollo de métodos de reciclaje más sostenibles. “La obtención de nanopartículas a través de medios biológicos no solo es económica, sino que también presenta una huella de carbono e hídrica mínimas, consolidando a Chile como un referente en innovación minera”, concluyó.