De la prueba y el error nacen no solo nacen grandes ideas. Es una forma de perfeccionar algo y de avanzar en lo que sea que se está trabajando. De eso saben bien en el Centro Integrado de Pilotaje de Tecnologías Mineras, CIPTEMIN, corporación sin fines de lucro que se dedica a realizar pruebas en espacios similares a los de las faenas mineras para probar tecnologías y procesos.
“Hoy en Chile se está haciendo pilotaje y los centros que se dedican a esto funcionan. El modelo está operativo y los innovadores que realizan desarrollo tecnológico están entendiendo que el hecho de que un tercero sea el ente validador, agrega un enorme valor a su innovación”, cuenta Andrés Völker, gerente de Negocios y Vinculación Tecnológica.
Con el avance de la tecnología y la multiplicidad de investigaciones que se están realizando en minería, este centro se ha transformado en un articulador de pilotajes: distintas empresas ponen a disposición su infraestructura y recurso humano, para que se hagan pruebas de innovación tecnológica en sus espacios.
“Si las mineras abren su espacio de prueba, todos ganamos. Primero, porque se le da un impulso a la innovación por su gran capacidad de salir a la industria; y segundo, porque si esa innovación llega a funcionar, se trata de una mejora para los procesos mineros que se traduce en beneficios para la productividad, el medio ambiente, la seguridad y en la variable que corresponda”, explica Völker.
Todos ganan
Algunas de las mineras que han entendido el rol fundamental de los centros de pilotaje, son ASMIN, ENAMI y el grupo minero Las Cenizas, que abrieron sus puertas para la realización de pruebas. En sus espacios, CIPTEMIN está pilotando 12 tecnologías. “Hoy contamos con una red de prueba de más de 15 espacios industriales diferentes, lo que nos ha permitido desarrollar la validación de los pilotajes”, asegura Völker.
“Esto nos ha posicionado de forma rápida, ya que los innovadores necesitan fundamentalmente espacios de pruebas”, cuenta Juan Sotomayor, ingeniero de Negocios de CIPTEMIN. “Como complemento hemos desarrollado una red de más de 130 asesores expertos en diferentes áreas de los procesos mineros tecnológicos, lo que nos permite acompañar y asesorar técnicamente los pilotajes, para que las pruebas se realicen de manera óptima”, agrega el ejecutivo.
CIPTEMIN también juega un papel importante en cuanto a la formación de personal capacitado en pilotajes, un ámbito aún en ciernes en Latinoamérica. “Vamos más allá de articular los espacios de prueba, porque disponemos de capital humano avanzado en pilotaje que asegura el diseño experimental y los protocolos, pero también contribuimos a la formación de personas, ya que el pilotaje de validación para la minería es una novedad a nivel latinoamericano”.
Para qué pilotar
Los 12 pilotajes que CIPTEMIN está probando actualmente, involucran tecnologías e innovaciones desarrolladas por empresas, emprendedores, universidades y centros de conocimiento. La mayoría de estos proyectos están enfocados en mejorar distintas áreas de especialización minera, como minas (rajo y subterránea), geología, tronadura, geomecánica, mantenimiento, hidrometalurgia, flotación, lixiviación, electroobtención y fundición. Los impactos de estos pilotajes apuntan a generar diversos beneficios, tales como:
• Optimizar las redes comunicacionales.
• Mejorar la seguridad operacional con sistemas de fortificación, aumentar la productividad y la toma de decisiones automatizando los procesos y digitalizando la operación para minería subterránea.
• Recuperar la pérdida de mineral a causa del desplazamiento del material tronado (dilución).
• Digitalizar el proceso de lixiviación mediante informes automáticos.
• Extraer la borra de plomo de una celda electrolítica.
• Optimizar el control operacional de las fundiciones a través de sensores y digitalizar variables críticas;
• Reducir costos operacionales en el proceso de flotación, conjunto de sensores que miden la corriente, temperatura y calidad de cada cátodo en línea.
• Optimizar el proceso hidrometalúrgico, incrementar la recuperación de cobre y molibdeno.
• Crear un sistema predictivo de mantenimiento industrial basado en Inteligencia Artificial.
