Las iniciativas son desarrolladas por BHP y Fundación Chile, en el marco de su iniciativa “Súmate”.
Súmate es una convocatoria impulsada por BHP y Fundación Chile, a partir de 2020, que busca identificar y apoyar el desarrollo de proyectos para que las comunidades de Antofagasta y Tarapacá puedan adaptarse a los efectos del cambio climático.
En este contexto, los proyectos seleccionados fueron PURI, cuyo objetivo es implementar tecnologías que permitan la reutilización de aguas grises; AcuyMinAgro que busca desarrollar centros de acuicultura marina en áreas de manejo con semillas marinas sustentables; y Kuskalla, iniciativa que busca generar soluciones de energía solar, monitoreo hídrico y un modelo de gestión de residuos en las localidades de Mamiña e Iquiuca, ubicadas en la Región de Tarapacá.
Las iniciativas tienen una duración de tres años, en el cual el primero se aborda la planificación junto a la comunidad; el segundo corresponde a la ejecución de las soluciones; y el tercero de evaluación, para asegurar la sustentabilidad de los proyectos.
PURI: opción sostenible para las aguas grises
PURI fue una de las propuestas ganadoras de Súmate. Esta iniciativa busca enfrentar uno de los grandes problemas del norte del país: la escasez hídrica.
El proyecto es ejecutado por PURI Global y tiene como objetivo implementar tecnologías que permitan la reutilización de aguas grises. Uno de los pilotos realizará una intervención en departamentos ubicados en Antofagasta, donde se integrará a la red de alcantarillado una red paralela que contenga las aguas grises que llegarán a una planta de tratamiento, para reutilizarlas en la creación de jardines para las vecinas y vecinos de la comunidad, beneficiando a más de 200 familias. El otro piloto es en un jardín infantil de JUNJI en Antofagasta que beneficia a más de 100 niñas y niños de entre 2 a 5 años. Este piloto busca renovar la infraestructura del establecimiento incorporando una planta de tratamiento de aguas grises que recolectará las aguas residuales, reutilizándolas en el riego de las áreas verdes con árboles, arbustos y plantas y flores del jardín de infantes.
AcuyMinAgro: integrando acuicultura, minería y agricultura
Se trata de una iniciativa pionera en Antofagasta que integra en forma complementaria y circular el desarrollo de la acuicultura, minería y agricultura en el litoral costero e interior del norte de Chile.
El proyecto es ejecutado por la Universidad Católica del Norte y busca implementar centros de acuicultura marina en áreas de manejo con semillas marinas sustentables. Hasta la fecha se ha trabajado en conjunto con sindicatos pesqueros y caletas para solicitar acuicultura a pequeña escala en su área de manejo. El proyecto también diseñó e instaló un Centro Hidropónico, donde el objetivo principal es la producción para autoconsumo mediante la transferencia de conocimientos a mujeres de pescadores en el manejo y cultivo de hortalizas bajo la tecnología de hidroponía en mesas con sustrato de fibra de coco.
La experiencia que ha obtenido el proyecto durante estos años ha sido compartida con la comunidad a través de seminarios internacionales, conversatorios y cursos impartidos en la Universidad Católica del Norte para temas de acuicultura y sustentabilidad.
Kuskalla: energías limpias para las comunidades indígenas
Kuskalla –“juntos” en lengua quechua– también fue una de las iniciativas ganadoras de Súmate. El proyecto es liderado por EBP Chile, en colaboración con Ser Patrimonio y el apoyo de SMI ICE Chile y Power Ledger. Se trata de un proyecto piloto que contempla generar soluciones de energía solar, monitoreo hídrico y un modelo de gestión de residuos en las localidades de Mamiña e Iquiuca, ubicadas en la Región de Tarapacá.
Todos las soluciones se encuentran adaptadas a la realidad local, bajo una metodología de participación y apropiación que vincula la innovación de estas tecnologías con los saberes y costumbres locales.
En Mamiña se instaló un sistema solar comunitaria del tipo micro red en 20 viviendas y en el colegio de la localidad, beneficiando a cerca de 100 personas. Por otro lado, se instaló un biodigestor, lo que plantea un modelo de economía circular, a través de la recuperación y aprovechamiento de los residuos orgánicos generados a nivel domiciliario por los habitantes del lugar, permitiendo la generación de un nuevo producto de uso comunitario, como lo son los biofertilizantes para el sector productivo o incluso para uso particular a nivel residencial.
En Iquiuca se construyó un estacionamiento vehicular para 5 plazas, sobre el cual se instala un sistema solar fotovoltaico. La comunidad está haciendo uso de la energía provista por el sistema solar con almacenamiento, reemplazando el generador de diésel que existía. Adicionalmente, se está implementando un sistema de monitoreo hídrico, que permita el uso eficiente del agua en las áreas de producción agrícola.
