Buscan avanzar hacia la carbono-neutralidad a partir de energías renovables no convencionales (ERNC).
En miras a frenar el cambio climático, la industria minera se ha propuesto avanzar hacia procesos más sustentables, y una de las regiones donde están haciendo cambios importantes es en la de Antofagasta, en la que importantes empresas acelerarán la utilización de energías limpias en sus operaciones.
Lo anterior, considerando que la minería en dicha zona, que concentra el 54% de la demanda eléctrica de la industria de acuerdo a la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), incrementará su consumo al 2030, principalmente por la construcción de plantas desaladadoras y concentradoras.
En esa línea, la minería busca ser una industria más verde y producir un cobre trazable, por lo que resulta clave la descarbonización de su suministro eléctrico y así alcanzar la carbono-neutralidad a partir del uso de energías renovables no convencionales (ERNC).
Entre algunos casos, destaca la minera Zaldivar Antofagasta Minerals, que opera con energía 100% renovable, y también la Minera El Abra de Freeport- McMoRan que en 2021 comenzó a utilizar energía suministrada en base a fuentes limpias y renovables, gracias a un contrato firmado hasta 2028 con Engie.
Junto con esto, desde Sierra Gorda informaron a El Mercurio de Antofagasta que desde el 2023 el suministro eléctrico será 100% renovable gracias a un acuerdo comercial con AES Andes.
Sumado a lo anterior, las operaciones de Escondida y Spence de BHP comenzaron a funcionar con energía proveniente de fuentes renovables en agosto de 2021, a raíz de la entrada en vigencia del contrato licitado en 2019, el que involucra la adjudicación de 3 TWh/año por 15 años. Mientras que el acuerdo por 10 años con Colbún, también licitado el año pasado, es por 3 TWh/año y entra en vigencia en enero de 2022.
Al respecto, desde la minera señalaron que “la entrada en vigencia de los primeros contratos de energía renovable son una gran contribución a la transición de BHP a nivel global hacia el logro de cero emisiones al 2050; y constituye un gran hito para Escondida y Spence, que lograrán abastecerse con 100% de energía renovable a mediados de esta década”.
